Nuestro chef y gerente es Jordi Guitart. Con sólo veinticuatro años este joven campesino decidió sacar adelante este proyecto tan bonito que tenemos ahora. Con estudios superiores de restauración y con formación continua, Jordi ha sido stager de prestigiosos restaurantes en Francia y ha trabajado junto a equipos profesionales muy cualificados.

​​

Desde el primer momento nuestro equipo apuesta por la cocina de siempre, sacando provecho de los productos de temporada y de proximidad, poniendo toques modernos y de vanguardia al alcance de todos.

​

Jordi es el alma de nuestra casa, lo que piensa en cosas nuevas, lo que ejecuta diferentes técnicas y lo que busca la manera de satisfacer a los comensales con comidas buenas. Aporta a todo el equipo una forma cooperativa para trabajar en grupo y hacer que Cal Marquès trabaje como un restaurante familiar.

​

En la Sala, tenemos a Cristina Castells, uno de los otros pilares fundamentales de nuestra casa. Con estudios  de sumillería, Cristina es también diploma WSET como experta en vinos. Es la jefa de sala y la sumiller, la persona que habla con el comensal y ayuda a convertir los platos elaborados en cocina en una experiencia inolvidable para nuestros clientes.  Esto lo hace apostando por un servicio muy esmerado en la mesa, desde la bodega (con referencias muy variadas, sorprendentes y originales), las recomendaciones de cada temporada y maridajes, hasta el servicio de cafés, por ejemplo.  Además, como Cal Marquès es un proyecto pequeño y familiar, a menudo Cristina aporta también ideas, consejos y experiencia en la cocina.